Hambre

Lunes 02 de diciembre de 2019

Confianza de sobra y falta de hambre quizás hayan sido los motores de Santos y Tigres para quedar fuera de la Liguilla, cuando justamente estos dos equipos eran los favoritos al título por la consistencia que mostraron a lo largo del torneo.

En la que quizás era la serie más pareja, Rayados le pintó la cara a unos Laguneros que se mostraban fuertes en la Liguilla por llegar como líderes. Monterrey tuvo un buen cierre de torneo y nadie puede fiarse de una plantilla como la de La Pandilla, aunque su rival haya sido el que más puntos cosechó en el torneo.

Los dirigidos por Tony Mohamed ahora marcarán la pauta de si la Final se jugará después de Navidad, al tener que hacer una pausa para disputar el Mundial de Clubes, o cierran su participación este fin de semana. En el papel, los Rayos son una plantilla de menos envergadura que puede facilitarle las cosas a la Raya.

La eliminación de UANL a manos del América se debió a la falta de hambre. Como si hubieran llegado al juego de vuelta con una ventaja muy amplia, o como si no hubiera necesidad de atacar. Fue hasta el segundo tiempo cuando, con el ingreso de Luis Quiñones, Tigres se mostró diferente y, como pocas veces, propuso juego y fue ofensivo.

Pero no fue suficiente y el América, que es un experto en Liguillas, terminó una hazaña que, por lo hecho en el primer tiempo, parecía una tremenda humillación para el conjunto felino.

A Tigres le faltó lo que a Morelia le sobró: hambre. Porque los Purépechas, siendo uno de los equipos más modestos de la Liga, se instaló en la Semifinal con mucho corazón y una excelente dirección técnica por parte de Pablo Guede quien desde ya ha sorprendido a propios extraños en su corta gestión.

Twitter: @_NataliaLeon_