Herrera está perdido

Lunes 12 de septiembre de 2022

¿A qué juega Tigres? Miguel Herrera traicionó su propio estilo, para buscar un equilibrio que le quitó el poder goleador que tenía.

Hace varios partidos que no encuentra los caminos. El triunfo contra Toluca creyó que era el faro en las aguas movedizas por las que transitaba (cuatro sin ganar) y ante Chivas vuelve a cambiar.

Una cosa es tener variantes, y, otra muy distinta, seguir buscando la identidad cuando faltan dos fechas (tres para Tigres) para el cierre del torneo. Una identidad que ya tenía.

Probó con cuatro defensas, con cinco; con un volante de contención, con dos contenciones; con doble nueve, con equipo ofensivo, con cuadros defensivos, y nada le funcionó como pretende.

Mi hipótesis es que, en su afán por dejar contentos a todos los jugadores, no quedar mal con nadie, mantener el buen ánimo en el plantel (que sí lo hay, me consta), sacrificó ese poder ofensivo que lo hizo tan peligroso.

Antes del comienzo del Apertura se fue Jesús Dueñas, dijo que Chuy Garza era su opción y que esperaba la recuperación de Chaka Rodríguez. Un par de días después, se confirmó el arribo de Vladimir Loroña (un acierto).

Arrancó con una idea, la cual no incluía a Carioca. La gente presionó tanto, lo abucheó, pidió a gritos por el brasileño, que no le quedó otra que meterlo, dejando de lado sus creencias y el estilo que había pensado para el equipo.

Durante el primer tercio del torneo se jactó de los pocos goles que recibió, apoyando públicamente a los cuestionados Diego Reyes e Igor Lichnovsky. ¿Qué hizo? Fue a buscar un central de jerarquía, quien se ganó la titularidad rápidamente y será difícil sacarlo cuando se recupere su hijo pródigo (Reyes).

Dejó ir a Yeferson Soteldo (indisciplinado), pero no suplió la salida con un futbolista en ese sector. Llegaron las lesiones y el equipo lo sintió, basta con mirar el banco de suplentes en el 0-0 contra Necaxa, plagado de jóvenes.

En el veranito que tuvo en el torneo, Raymundo Fulgencio era inamovible, titular y productivo. El DT lo sacó de un momento a otro, ni lo puso perdiendo 1-0 frente a León y ahora vuelve a apostar por él.

El plan de Vigón como motor del ONCE duró pocos partidos, lo sacó por una baja de juego muy obvia y otra vez lo incluye, esperando que le dé soluciones que no encuentra por ningún lado.

Miguel Herrera habló de falta de contundencia, la cual sí existió en algunos partidos. Ante León ni siquiera generó situaciones de peligro, por eso el volantazo de cara al duelo con Chivas.

Tigres se acostumbró al revoltijo, al ganar como sea. Antes, los goles se le caían de los bolsillos, así tenga que ganar 3-2 o 4-3. El Piojo trató de "Ferrettizar" a un equipo que ya había perdido la memoria. Y la clasificación directa está pendiendo de un hilo.

Twitter: @GiraudiMatias