Viernes 04 de septiembre de 2020

TIJUANA.- Xolos jugó el mejor partido del semestre cuando nadie lo daba de favorito. Dependió de Fabián Castillo para los goles, pero de un equilibrio en el momento preciso para vencer 2-1 a unos Rayados que no entendieron la forma de defenderse. Sorpresa en la frontera, oxígeno para Pablo Guede y otra vez presión para Antonio Mohamed.

Tijuana encontró en el delantero colombiano la fórmula para resolver una ecuación que sólo León encontró, porque fue el único rival que venció a un Monterrey que llegaba con buen ritmo. Los regios mostraron una de sus peores caras en una noche que levantó dudas desde el arranque.

Castillo marcó primero apenas al minuto 2 producto de una recuperación en media cancha, dejando en el olvido a Nicolás Sánchez en su mal intento por salir a recortar una pared. De ahí, con el marco en puerta, anticipó un partido de mucho beneficio para los locales, que siguen mostrando autoridad en el Estadio Caliente donde han ganado sus 10 puntos hasta la fecha.

Terminó lastimado por tanto esfuerzo hasta que salió de la cancha (80') con un desgaste total, pero con la virtud de haber hecho las anotaciones del gane, porque clavó el 2-1 decisivo al 52' y no hubo más que reconocer su exigencia y su buena comunión con Bryan Angulo.

Monterrey se perdió por completo por no tener relación entre líneas. Se notó la ausencia de Celso Ortiz en media cancha, que faltó por una sobrecarga muscular, porque Matías Kranevitter no pudo atrapar a nadie. El argentino, incluso, se vio opacado en el segundo gol con un túnel, reflejando una noche para el olvido con 11 pérdidas del balón, las mismas que Vincent Janssen adelante.

El Toro nunca pudo pasar la barrera que los de casa le cargaron con un Jordan Silva que por fin apareció y cumplió como central, acompañado de la buena labor de Christian Rivera, a pesar de que se equivocó en el gol del descuento que les hizo Rogelio Funes Mori, quien encontró el empate (25') por un pase de Dorlan Pabón y se acabó.

Los goles de Fabián Castillo ante Rayados

Tijuana no dejó de robarle la bola e incomodar a los Rayados por no dejarlos libres en su presión y su intento de resolver en base a centros al más puro estilo de Mohamed, técnico que ya ocupa la racha más larga de partidos (20) recibiendo al menos un gol en la Liga en los torneos cortos de su equipo.

Entre Castillo y Angulo hicieron el daño suficiente para ver a Xolos como el dominante y como pocas veces se le vio en el torneo. Guede dibujó mejor la táctica y encontró en la posesión y el pase corto la solución a su futbol, aferrado a respirar por las desconcentraciones rivales y los grandes espacios que ni Stefan Medina, ni César Montes pudieron cubrir.

La casa ganó el juego, pero también crédito en un momento de mucho peligro. Ahora, con dos triunfos en sus últimos tres choques, parecen haber ganado aire puro en el lugar 11 transmitiendo el malestar a un Monterrey (6°) que, por más oportunidades que tiene -y con todo y sus recientes victorias- sigue cantando a todos que las ausencias le pesan.

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Fotografía: Xolos de Tijuana