Lunes 26 de febrero de 2024

"Los días cotidiano se tratan de venerar la comida y lo cotidiano, estar en familia y hablar de quienes somos", dice Lila Downs sobre su regreso a su tierra natal Oaxaca.

Ahí se pasa los días con su familia y sus hijos, y confiesa sentirse feliz. "Las narrativas nuestras sobreviven a pesar de todo lo que hemos vivido en Latinoamérica", afirmó la cantautora de 55 años.

Su padre, Allen Downs es norteamericano de origen escocés y su madre, Anastasia Sánchez, es una india mixteca. Lila creció entre Oaxaca y Minnesota y reconoce orgullosa sus raíces mixtecas, y precisamente lo refleja los contrastes de la mezcla de culturas en su música, ya que mezcla maravillosamente todo tipo de ritmos y estilos: rock, folk, blues, jazz, ranchera, bolero.

Estudio su primer año de preparatoria en Los Ángeles y ahí inicio su conciencia de lo que significaba ser latina en Estados Unidos.

"Lila es el puente que comunica a una cultura con otra, da a conocer el sentimiento, el pensamiento y el contenido histórico de la cultura indígena. Ella es la ventana por la que se asoman, es el canal. Es por eso que su trabajo tiene un valor inquebrantable, porque su voz es masiva", confesó Angélica Ruiz, una de sus colaboradoras más cercanas.

Es una persona altruista, antropóloga de profesión, cantante, compositora, productora y activista, una mujer sencilla que no se siente una celebridad, sino que disfruta de cantar, llevar su folklor a otros sitios del mundo, presume la cultura de Oaxaca, y le preocupa la educación de la niñez mexicana.

Lila estará pronto en Monterrey su presentación con su tour 2024, el próximo 1 de marzo, es en el Escenario GNP (antes auditorio Pabellón M) donde nos regalará una magnífica noche con música, fiesta y la voz de Lila que realmente es capaz de reiniciarnos a nuestro origen.