Viernes 07 de agosto de 2020

A lo largo de la historia del futbol mexicano hemos visto muchos casos de hermanos jugando al mismo tiempo en la Liga, en algunas ocasiones para el mismo equipo y en otras para diferentes clubes.

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Por ejemplo, en tiempos recientes vimos en acción a los hermanos Lainez, cuando Diego militaba en América y Mauro en León y después en Lobos BUAP. Y, poco tiempo atrás, a los hermanos Palacios, es decir, Alejandro y Marco, los famosos Pikolines, quienes lograron cuatro campeonatos de Liga con los Pumas.

En la Liga MX Femenil, a pesar de sus cortos tres años ya tenemos al menos un par de casos de este tipo: uno de hermanas en el mismo conjunto y otro en clubes distintos. En ONCE repasaremos las historias del certamen. Además de casos de hijas de ex futbolistas que siguieron con el legado de su padre.

HERMANAS Y COMPAÑERAS

En América es donde milita la pareja de hermanas más conocida: Jaydi y Jana Gutiérrez. La primera de ellas, portera de 18 años, ha estado con las Águilas desde el inicio de la Liga y, a pesar de tener poca actividad en los primeros torneos, fue convocada al Mundial Sub 17 del 2018 en Uruguay, donde México consiguió un histórico segundo puesto.

La guardameta Cecilia Santiago pasó a formar parte del PSV de Holanda hace aproximadamente un año y, a raíz de ello, Jaydi comenzó a tener más minutos, alternando la portería con Heidi González.

Por su parte, Jana, de apenas 16 años, se unió al cuadro capitalino a partir del Clausura 2018. De igual manera que su hermana, también su participación ha sido de menos a más en cuanto a minutos, al ir tomando cada vez más experiencia.

Jana inicialmente practicaba baile y gimnasia, pero le llamó la atención que su hermana realizaba viajes para distintos torneos, por lo cual eligió enfocarse en el futbol al 100 por ciento.

“Mi hermana fue bailarina, y luego vio que con el futbol viajabas, ibas a torneos y decidió meterse aquí. Es muy emocionante ver a un miembro de tu familia ahí, ver cómo convive y cómo te apoya en los momentos más difíciles. Cuando necesitas a alguien siempre está ahí y como yo soy la mayor (ella) es mi hermana chiquita, me siento la mamá”, dijo en una ocasión Jaydi en entrevista.

Primero, Jana jugaba como lateral derecha, pero en los más recientes certámenes ha pasado a ser volante ofensiva, regularmente también por mismo sector. Ambas lograron el campeonato en el Apertura 2018, cuando el América venció a Tigres en serie de penales.

Otro dato de ambas jugadoras es que son hijas de Miguel Jalisco Gutiérrez, ex futbolista, quien formó parte de varios equipos en Primera División y en la Liga de Ascenso, como por ejemplo Atlante, Jaguares y Leones Negros, club donde se retiró en el 2013.

LAS NAVARRETE

Por su parte, otro caso de futbolistas hermanas en la Liga es el de Perla y Dayana Navarrete, ambas originarias de Ciudad Juárez, Chihuahua.

Perla, quien tiene 26 años, debutó en el Clausura 2018 con León, equipo con el que disputó 46 encuentros de 48 posibles. Fue clave para apoyar a que La Fiera jugara su primera y única Liguilla hasta el momento en el Clausura 2019.

Juega como volante por derecha y tras su paso por el conjunto del Bajío pasó a Tigres, donde estuvo en las campañas Apertura 2019 y Clausura 2020, aunque tuvo poca actividad.

Su hermana menor, Dayana, quien tiene 19 años y también es mediocampista, se unió a las filas de las Bravas de Juárez en el Apertura 2019, es decir, cuando el equipo debutó en la Liga MX Femenil.

Incluso, ambas se vieron las caras como rivales el 27 de septiembre de 2019, cuando Tigres visitó a Bravas. En dicho cotejo, Perla ingresó como relevo para el segundo tiempo, mientras que Dayana entró en los últimos minutos, topándose en el terreno de juego.

Una curiosidad es que Sergio Orduña, ex jugador y campeón con Tigres en 1978 y 1982, es como un padrino para Perla, así nos lo contó la futbolista, cuando en entrevista para ONCE se le preguntó cuál era su ídolo en el deporte.

“Hay una persona que considero muy especial. Es Sergio Orduña, es una persona muy cercana a mí. Me ha ayudado muchísimo en el ámbito profesional, me ha enseñado muchas cosas y gracias a él también es por el hecho de que estoy aquí. Porque me ha llevado en un proceso, me entrenó, me enseñó cosas que él veía en el juego. Yo lo adoro, es una persona increíble y he aprendido mucho de él”, comentó.

FUTBOL EN LA SANGRE

Así mismo, hay otros lazos familiares en el futbol femenil de nuestro país. Por ejemplo, de jugadoras que son hijas de ex futbolistas profesionales.

Además del caso de las hermanas Gutiérrez, está el de Nailea Vidrio, quien tiene 17 años y fue parte de las Tuzas del Pachuca desde que inició la Liga hasta hace algunas semanas, cuando se anunció su traspaso al León.

Nailea es hija de Manuel Vidrio, ex jugador profesional que vio acción como defensa desde 1991 hasta el 2006, cuando se retiró. Destacó principalmente en Chivas y Pachuca e, incluso, jugó algunos partidos con el Osasuna de España. Ganó en total cuatro campeonatos con los Tuzos.

Otro es el de Valentina Oviedo, hija del colombiano Frankie Oviedo, quien participó en el futbol mexicano con América, Puebla, Pachuca y Necaxa entre los años 2000 y 2007, ganando un título de Liga con las Águilas.

Valentina tiene 18 años y nació en la Ciudad de México. Juega como volante ofensiva y está con Tijuana desde el Clausura 2018. Al tener también la nacionalidad colombiana, fue convocada a la Sub 20 de aquel país.

“No pensaba en absoluto que una Selección de Colombia me llamara, porque está muy lejos, yo no pensaba que ellos me estuvieran viendo. Fue algo muy grande para mí, un orgullo el que me llamaran a Sub 20 y poder participar en un Sudamericano allá en Argentina”, dijo recientemente para ONCE.

Frankie, quien estuvo al frente de Xolos Sub 20, va a dirigir a su hija en el Guard1anes 2020, ya que con la salida de Carla Rossi, fue elegido para tomar las riendas del equipo femenil en el torneo venidero.

Fotografía: ONCE