En su primer torneo con Lobos BUAP, Julián Quiñones le anotó a Rayados y le festejó a sus aficionados con la señal de los Libres y Lokos. Si lo hizo fue por amor a Tigres.

Después sufrió un descenso precisamente contra Monterrey y la gente no lo perdonó. Ahora que volvió a los felinos, explicó el gesto.

"Es como si tú tienes una novia, de la noche a la mañana no vas a olvidarla porque todavía la sigues queriendo, le sigues amando", declaró.

"Así pasa con este club que me abrió las puertas, me dio un gran recibimiento, siempre pienso en él, siempre estoy pensando en cómo le va".

Si bien no tuvo tanta participación con los auriazules en su primera etapa, logró identificarse muy rápido con sus seguidores y los valores del equipo.

"Me siento como en casa, muy cómodo estando acá, siempre soy bienvenido cuando esté la disposición del cuerpo técnico. Entrenando día a día para mejorar algunas cosas", comentó.

Fotografía: Tomada de vídeo