Martes 01 de diciembre de 2020

Entre el 17 de noviembre y el 4 de diciembre de 1976, uno de los mediocampistas más talentosos en la historia de Rayados vivió sus últimos días con la institución albiazul.

La estancia de Francisco Bertocchi con el Monterrey, no fue prolongada, pero fue la suficiente para que el uruguayo dejara huella como uno de los mejores mediocampistas en la historia del equipo regio.

El talento, liderazgo y capacidad goleadora del Tano, lo ponen como referente en Rayados. A casi 44 años de su adiós ante los aficionados, esta es su historia.

SUS ORÍGENES

Uruguayo de nacimiento, tuvo como cuna futbolera al Peñarol. Luego de su primera estancia con los Aurinegros, el Vikingo pasó al equipo Liga Deportiva Universitaria de Quito, en Ecuador, donde permaneció dos años. En esa institución logró una marca histórica de ocho goles en un mismo partido.

A pesar de su también corto paso con la LDU, en ese equipo se convirtió en leyenda al ganar un título de Liga y de goleo. Después tuvo una segunda etapa en ese club, pero ya como técnico.

A Rayados arribó para la temporada 1974-75, procedente del Liverpool uruguayo. Con el equipo regio jugó de la 1973-74 a la 1975-76, además del arranque del torneo 1976-77.

Su carrera continuó y terminó en el futbol mexicano con el Tampico, donde jugó cuatro temporadas. También tuvo un paso con la Selección de Uruguay entre los años de 1971 y 1973.

TANO Y VIKINGO

El apelativo, de Tano, se debe a sus raíces italianas, en Uruguay se suele llamar así a las personas que tienen nexos y semejanza con el perfil físico italiano.

En México también se le conoció como el Vikingo. Su apariencia era la de un jugador más o menos alto para la época y de tez blanca. Pesaba unos 80 kilogramos y medía 1.76 metros de estatura.

A pesar de su figura corpulenta, el sudamericano era un jugador muy dúctil que protegía el balón como pocos; rara vez perdía el esférico.       

“Mi espacio de acción era de media cancha hacia arriba. Era un armador de juego, me movía entre los volantes de marca y los delanteros netos. Tenía posibilidades siempre de llegar al arco contrario, más en aquellos tiempos que se jugaba un 4-2-4. Aproveché mucho los remates de larga distancia, de ahí que tuve la suerte de hacer varios goles”, así se definió Bertocchi como jugador, cuando entonces se jugaba con tres delanteros.   

¿POR QUÉ LLAMÓ LA ATENCIÓN DEL MUNDO?

Antes de venir a México, el Tano Bertocchi tuvo un logro que después de décadas y décadas sigue resonando en el futbol de Sudamérica, más en Ecuador.

El domingo 26 de octubre de 1969 entró a la historia al participar en el partido con el marcador más abultado en ese país, lo hizo marcando ¡8 goles!

Francisco tuvo un inolvidable show en el que anotó dos goles en el primer tiempo (minutos 40' y 43') y seis más en el complemento (46', 53' 57', 64', 77', 82'); la víctima fue el América de Quito y el marcador final fue de 11-0.

Además, las crónicas de aquel partido citan que el logro del Tano pudo ser más grande, pero tres goles más del charrúa fueron anulados. En ese entonces, sólo Pelé, con el Santos de Brasil, tenía esa hazaña; O'Rei lo logro en 1974, en un duelo ante el Botafogo.

En ese año, en 1969, la Liga y Tano lograron sus primeros títulos.

El Vikingo, siendo jugador de mediocampo, también terminó en esa justa como campeón de goleo con 26 anotaciones. La escuadra del Vikingo era dirigida por el brasileño José Gomes Nogueira, quien años después dirigió en México al León, UdeG, Toluca y Unión de Curtidores.

Fue un año redondo para Bertocchi y la Liga de Quito.

SU PASO CON RAYADOS

Después de su etapa en el futbol ecuatoriano, Vikingo regresó a su país y jugó en una segunda época con el Peñarol.

Al Monterrey llegó en la temporada 1973-74, procedente del Liverpool uruguayo. Peñarol era dueño de sus derechos y fue traspasado a Rayados por la cantidad de $32,000 dólares.    

Francisco lució en un equipo ofensivo y espectacular, que marcó época en el futbol mexicano, aunque sin la gloria de un título de Liga.

Lo que hizo el Tano con la camiseta de Rayados fue algo fuera de lo común: era un jugador cerebral, con mucha visión de campo; de esos pocos que ponían pases filtrados y con el plus de ser goleador.

Su debut con Rayados ocurrió el 21 de julio de 1973, en la segunda jornada de la temporada 1973-74; en ese duelo el Monterrey venció 1-0 Guadalajara. En aquel entonces, el equipo albiazul jugaba como local en el Estadio Universitario.

Su primera campaña en México fue deslumbrante, el Vikingo anotó 18 goles e hizo una pareja letal con el también histórico Milton Carlos, quien marcó 22 veces. Entre los dos "angelitos" hicieron 40 goles. En ese certamen, Rayados anotó 65; Milton terminó como sublíder de goleo y Bertocchi fue el cuarto mejor artillero.

Una dura lesión en la temporada 1975-76, dejó fuera al Vikingo en gran parte del torneo.

En poco más de tres años con Rayados, Bertocchi clavó 37 goles en duelos oficiales; permaneció en el club hasta los primeros partidos de la temporada 1976-77.   

El 17 de noviembre de 1976, el Tano alineó por última vez con el Monterrey, en un duelo ante el Jalisco, que terminó 2-2. Previo a un partido ante Chivas en casa, disputado el sábado 4 de diciembre, Bertocchi se despidió de la afición rayada y lo hizo de una manera muy emotiva: con vuelta olímpica al tiempo que recibía el reconocimiento y afecto de los hinchas.

SIGUIENTE PARADA: TAMPICO

Bertocchi continuó y concluyó su carrera en México. En la temporada 1977-78 arribó al Tampico y ahí jugó hasta la temporada 1980-81. Con los Jaibos anotó 26 goles.

El Vikingo fue una de las primeras influencias en el profesionalismo sobre Benjamín Galindo, uno de los mediocampistas más talentosos en la historia del futbol mexicano. Quien décadas después fue llamado el Maestro, apenas iniciaba en el máximo circuito cuando el Tano ya iba de salida.

SU ETAPA COMO TÉCNICO

En un equipo donde fue jugador histórico, recibió la oportunidad de mostrarse como técnico en un par de ocasiones. Tano dirigió a la Liga Deportiva Universitaria en la temporada 1989-90 y en 1996, en ambas etapas con poco éxito.

Hace casi 44 años, Francisco Bertocchi se despidió de la afición de Rayados. El Tano pertenece a un selecto club que reúne a hombres, que dejaron mucha huella en el Monterrey con tan poco tiempo.

Fotografía: Mexsport