Miércoles 08 de junio de 2022

A poco menos de dos semanas de haberse terminado el Clausura 2022, en Tigres no se conocen aún nombres de refuerzos para el siguiente torneo, a pesar de que la afición detecta huecos en el numeroso plantel a las órdenes del Piojo Herrera.

El técnico mexicano impera un estilo de juego ofensivo, donde los felinos cargan el área con muchos elementos y priorizan el juego por bandas, donde se lanzan al espacio a los extremos para que André-Pierre Gignac marque o el interior finalizador aproveche los espacios dejados por el francés. Así, se convirtieron en el mejor ataque del fútbol mexicano, sin embargo, flaquearon en la que había sido su gran ventaja en la década pasada.

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Herrera comenzó con línea de cuatro zagueros su gestión en Tigres, pero al final, reconvirtió al 3-4-3. Los felinos acusaron de fragilidad defensiva en muchas ocasiones, donde los rivales hacían saltar a uno de sus tres centrales y la línea colapsaba, rota por el desmarque de ruptura de algún rival. Si Nahuel Guzmán no hubiera estado en el arco, posiblemente los auriazules hubieras sufrido más.

Es por ello que un defensor central faltaría en la plantilla norteña, ya que Guido Pizarro tuvo que reconvertir su posición para jugar como líbero, además de los constantes problemas físicos de Diego Reyes, que lo privaron de estar al 100 en plena Liguilla.

Otra zona a reforzar por Mauricio Culebro y compañía debería ser la lateral derecha. La baja de juego de Luis Rodríguez, sumada a las diferentes circunstancias que atraviesan canteranos como Erick Ávalos o Jesús Garza hacen de esta una de las zonas frágiles.

Sin embargo, a pesar de los múltiples señalamientos que existen al respecto, la mira de la cúpula de Tigres se dirigiría a la delantera, ante los múltiples rumores sobre la salida del paraguayo Carlos González, sonando Toluca y Cruz Azul como los principales candidatos.

Fotografía: Tigres