Miércoles 12 de noviembre de 2025

La tarde previa a su cita más importante en la historia, Cruz Azul Femenil vivió un entrenamiento diferente en las Instalaciones de La Noria. No fue una práctica común, pues el aire se llenó de tambores, confeti, bengalas y voces que coreaban con fuerza: "iQueremos la copa!". Decenas de aficionados se dieron cita para acompañar al equipo antes de su duelo de lda correspondiente a las Semifinales ante Tigres, haciendo sentir a las jugadoras que no están solas.

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El ambiente fue una mezcla de orgullo, emoción y esperanza. La afición celeste —muchas veces acostumbrada a sufrir en silencio— se convirtió en combustible anímico para un grupo que está rompiendo sus barreras. Cada cántico y cada bandera ondeando en el viento se convirtió en un recordatorio de lo lejos que ha llegado este equipo, que empezó la temporada sin los reflectores, sin figurar entre los grandes favoritos, pero con la convicción clara de escribir su propia historia.

Cruz Azul Femenil fue el caballo negro del Apertura 2025. Su camino no fue sencillo, ya que comenzó con altibajos, partidos cerrados, errores que le costaron puntos y críticas que pusieron a prueba la confianza del grupo. Pero esa mezcla de tropiezos y aprendizajes cimentó la identidad de un equipo resiliente. Lo que hoy convence de la Máquina no es sólo su futbol, sino su carácter. 

El conjunto de Diego Testas se ganó el cariño y la confianza de su gente a pulso. En su primera aparición en Liguilla, luego de tres años sin clasificar, no solo rompió su propio récord de puntos con 28 unidades, sino que firmó una temporada histórica con 42 goles a favor, ocho victorias y triunfos de autoridad ante rivales de peso como Rayadas y Toluca, a quienes les marcó cuatro tantos. Poco a poco, el grupo dejó de ser una sorpresa para convertirse en una realidad.

Su gesta más reciente fue en los Cuartos de Final, en donde eliminó nada menos que al actual campeón, Pachuca, y lo hizo con carácter. Aunque en la Ida cayó 2-1 con doblete de Charlyn Corral y descuento de Ariel Chavarín, el equipo celeste no se rindió. 

En la Vuelta, disputada en el Estadio Hidalgo, ofreció una de sus actuaciones más memorables, goleando 5-0 a las Tuzas con tantos de Ana Lucía Martínez, Yaneisy Rodríguez, Deneisha Blackwood, Daniela Calderón y la propia Chavarín, quien se reivindicó tras fallar un penal en la primera parte.

Ese resultado no solo le dio el pase a las Semifinales, sino que confirmó que este grupo está hecho de resiliencia y carácter. Porque detrás de cada festejo hay semanas de esfuerzo, de partidos sufridos y de fe inquebrantable. Lo que antes era incertidumbre, se transformó en confianza; lo que parecían límites, hoy son retos superados.

Ahora, con el ánimo por las nubes y la voz de su gente como energía, Cruz Azul Femenil se prepara para enfrentar a Tigres, un gigante de la Liga, que además llega con la etiqueta de líder y mejor ofensiva-defensiva de la temporada. 

Sin embargo, queda claro que esta Máquina ya no teme a los grandes. Lo demostró con futbol, con corazón y con una afición que cree en lo imposible. Esta vez, el cuento de la Cenicienta podría tener un Final azul.