Jueves 18 de diciembre de 2025

La aventura de Sergio Ramos en México terminó sin pena ni gloria. El español, fichaje estrella de Rayados en el presente año, no logró liderar a los albiazules al título, sin embargo, dejó réditos en otras áreas. Crónica del "fichaje más importante en la historia del club", tal y como lo dijo Antonio Noriega, presidente deportivo de la institución.

El defensa central se convirtió de un secreto a voces a una realidad en un lapso de 3 semanas. Ojo, el contacto no comenzó en febrero, sino que existieron acercamientos desde antes. Reanudando la negociación, las primas por rendimientos y otras cuestiones fueron el objeto de acuerdo con René Ramos, hermano y representante del español.

MIRA TAMBIÉN: Consulta toda la información de Rayados

Con el viaje de la delegación rayada a Madrid y el dorsal 93 aprobado por la propia Liga MX, la bola de nieve comenzó su movimiento. Y así, un 8 de febrero, Ramos llegó en un viaje privado que aterrizó en un aeropuerto atípico para cualquier persona que busque llegar a Monterrey. Al mismo tiempo que Rayados disputaba un encuentro ante FC Juárez, su nuevo futbolista -y capitán- ya había realizado 7 veces más ventas del jersey con su nombre y número que en un periodo normal del club, hablándose de poco más de 1,000 en las primeras 24 horas de la contratación.

De acuerdo a lo mediático de su contratación, todo se reflejó en su presentación. El BBVA juntó más de 33,000 aficionados para escuchar las primeras palabras de Ramos con el jersey albiazul: "Esperamos que sea una Liga entretenida y competitiva, donde podamos disfrutar y ganar el torneo", dijo. Hasta llevaron caballos a recibirlo.

En los 34 partidos jugados, la parte más alta en rendimiento del defensor central se dio en el Mundial de Clubes, específicamente en el encuentro inicial contra el Inter de Milán. Aquel día, en el Rose Bowl, Ramos, comandó la defensa de 5, sumó 11 despejes, 4 intercepciones, 2 tiros bloqueados y ganó 4/5 duelos por aire, dejando como postal máxima el gol del empate ante los Nerazzurri.

También existieron claroscuros con el camero. La lesión que lo privó de estar en la Liguilla del Clausura 2025, un viaje para presentar un premio de los Grammys Latinos, algunas desatenciones defensivas que recayeron en goles en contra, entre otros. Ojo, también en el Clásico Regio, tuvo su historia al marcarle de penal a Nahuel Guzmán en el Uni, sin que esto significara una victoria para Rayados.

Mientras la Fase Final del Apertura se movía, en el aire estaba si Ramos renovaría o no. El silencio de la directiva chocó con el ruido formado por los medios españoles afines al jugador, quienes afirmaron que el capitán albiazul había decidido marcharse hablando en la cancha del Nemesio Díez con un: "Obviamente, fue mi último partido". Con una negociación que se frustró a partir de las pretensiones del campeón del mundo; jugador y club separaron caminos con un apretón de manos.

¿Qué dejó en lo que no se ve? Sus compañeros. El astro europeo se unió a Sergio Canales, Óliver Torres y Lucas Ocampos para dejar enseñanzas de recuperación élite al resto del grupo, impactando de lleno a los canteranos Iker Fimbres y Michell Rodríguez. En la central, uno de los más beneficiados de compartir con él fue Stefan Medina. Además, el español fue fundamental para recuperar las versiones futbolísticas de los mediocampistas Nelson Deossa y Jorge Rodríguez.

Destrabando temas contractuales y ya sin Ramos en la ciudad, Rayados aprovechó hasta el final el boom del jugador con un jersey conmemorativo con su firma y dorsal homenaje al Real Madrid, aunado a las palabras de agradecimiento del jugador con el entorno que lo acogió por 11 meses. Así terminó la historia del camero en Monterrey, sin títulos, sin Finales, pero con un año quedará en la memoria.