Miércoles 09 de octubre de 2024

Garra, orgullo y fuerza, tres características esenciales de Deisy Ojeda que la llevaron a alcanzar objetivos.

La defensa central paraguaya, de 24 años, llegó a México en el Clausura 2023 y en poco tiempo se ha ganado la titularidad en Gallos Femenil, convirtiéndose en una pieza crucial de su equipo.

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"Tenía dos ofertas, una de México y otra de Portugal. Fue una noche loca porque el empresario me presionaba para que me decidiera. Esa noche me senté, hablé con mi papá y le comenté de las ofertas", comentó Ojeda en una extensa charla con ONCE.

"Le dije que en México era en Querétaro y cuando le dije eso, mi papá se volvió como loco: 'Ahí… Es un club muy importante porque jugó Ronaldinho, jugó un paraguayo que es Pájaro Benítez', me dijo, y entonces decidí y me vine acá", agregó Deisy sobre cómo se inclinó por Gallos.

O sea que fue más la influencia de tu papá y el conocimiento que tenía del club…

"Sí, porque mi papá sigue mucho México, le gusta mucho, sigue la cultura, se pasa leyendo cosas de México. Inclusive estoy aquí hace un año y medio y él sabe más cosas que yo".

¿Fue complicado dejar a la familia y venirte a México?

"Como que ya estoy un poquito más acostumbrada porque llevo mucho tiempo fuera de mi casa. A los 15 -16 años me fui a España, entonces como que ya tengo esa tranquilidad. Sé que también estoy afuera porque puedo ayudar a mi familia. Estoy bien y aquí en México también estoy super bién porque desde que llegué me hicieron sentir como en casa y me dan todo el cariño que necesitaba. Me siento muy bien aquí".

En año y medio de haber llegado a Querétaro, ¿ha cumplido tus expectativas con el club?

"La verdad que sí. Desde un principio que me dijeron que iba a venir, había hablado con la directiva, me dijeron que venían cosas buenas y la verdad que el año que llevo aquí hemos mejorado muchísimo y más este torneo. Hemos hecho las cosas bien, por eso estamos peleando la Liguilla y esperemos que sí se nos dé, que clasifiquemos y por qué no pelear la Final y ganarla".

¿Qué significaría para ti jugar una Liguilla con Gallos?

"Es un sueño y una ilusión, porque lo vengo peleando hace un año y medio, entonces para mí va a ser un sueño".

¿Cuál ha sido el momento más significativo que has tenido con el equipo?

"Siento que el público, el apoyo que nos da. Aunque estemos perdiendo, ganando, en el Olímpico o en La Corregidora, donde estemos, siempre están apoyándonos".

SUS INICIOS EN EL FUTBOL

"Desde chiquitita mi hermano jugaba al futbol, iba detrás de él. A veces mi mamá y mi papá no tenían con quién dejarme y tenía que acompañar a mi hermano a su entrenamiento y me llevaba un balón y como era tan chiquita, a un costadito de la cancha estaba jugando con él. Ahí empezó todo".

¿Y luego ya te soltaste a jugar?

"Sí, hasta que mi papá me llevó a una escuela de futbol que se llama Ítalo Paraguayo, estaba cerca de casa y era con hombres. Ahí empecé y después fui a otra escuela que era con niños también. De ahí me fui al Olimpia, al futbol profesional, a los 11 años".

Siendo tan niña, ¿cómo manejaste ese cambio de amateur a profesional?

"En la escuela era una niña que solo quería jugar al futbol, era y hasta ahora me siento muy apasionada al futbol. Aparte siempre tuve el acompañamiento de mis papás. Tuve celular a los 17 años y fui muy responsable, hacía las cosas buenas para hoy llegar aquí".

Llegaste a mundiales en inferiores y posteriormente te enfundaste en la selección mayor...

"Fui a la selección a los 13-14 años en la Sub 17 y desde ahí empecé, y gracias a Dios ya no salí de selección. Tuve Sudamericanos y mundiales Sub 17 y Sub 20, luego fui con la mayor también y siento que esos logros son míos y de mi familia, porque ellos me apoyaron bastante".

¿Qué es lo que te caracteriza?

"Estoy muy orgullosa de ser paraguaya porque tengo la caracterización, tengo la garra, el orgullo, la fuerza. Eso a mí me hace muy bien. Como paraguaya me siento súper bien".

¿Te consideras algo ruda?

"Cuando jugué con niños competía, inclusive aquí, a veces siento que soy muy bruta, tengo que frenarme, aquí en un entrenamiento trato de no lastimar a una compañera. Sí, siento que con los niños siempre fue como rudo, ellos no te perdonaban nada y eso me ayudó a crecer. Eso lo llevé al futbol femenino también porque, aunque no crean, el futbol femenino también es de choques de fuerzas y velocidad".

Y, sobre todo, para la posición que juegas, así tiene que ser…

"De central, sí, a veces voy a disputar balones aéreos o al choque, pero nunca con mala intención o de lastimar a una rival o a una compañera".

¿Cómo ves a la Liga mexicana?

"En 6 años ha mejorado un montón, hay más competencia. Ya no hay un equipo que sea goleado, ya no hay equipos fáciles, ya todos compiten por igual".

¿Qué mensaje o qué enseñanza le transmites a las jugadoras jóvenes?

"Que los sueños están para hacerse realidad y soy una niña que siempre ha buscado eso de hacer los sueños, que se puedan cumplir y perseguirlos. Todos los sueños están para ser cumplidos y más si los persigues y lo intentas".

También es una realidad hoy el protagonismo del futbol femenil…

"Seguro, me siento muy contenta porque hay muchas niñas puedan llegar a vivir de su salario, que pueda independizarse. La verdad hoy sí se está apostando al futbol femenino y eso me deja tranquila para las niñas que vienen de abajo".

¿Para qué está Gallos Femenil?

"Lo primero que queremos es clasificar a Liguilla y una vez que estemos en Liguilla sé que el equipo va a responder mucho mejor y va a pelear porque ahí es todo contra todo. Lo vamos a lograr porque lo estamos soñando todas y estamos trabajando colectivamente. Somos una familia y lo hemos demostrado en cada jornada".