CON CALMA

Lunes 20 de enero de 2020

De escándalo amaneció la tabla general la mañana de este lunes: Chivas en la cima, Pumas sublíder, Tigres es lugar 16 y Cruz Azul es último. Pero ni el Guadalajara es el mejor, menos la UNAM con sus terribles errores defensivos frente a Bravos, ni los felinos y los Cementeros son plantillas que dan lástima.

Es temprano para hablar de que el Rebaño ilusiona porque es líder producto de un triunfo y empate a cero. Cierto: es un equipo grande y siempre dará de qué hablar, pero no es correcto, no es sano y tampoco es la realidad habrá que ver cómo reacciona Chivas con otro tipo de rivales.

También hay que considerar que dos equipos no sumaron en la primera fecha: América y Monterrey. De haber jugado la primera jornada, estoy segura que en los primeros lugares del certamen aparecería alguno de estos equipos, o los dos.

Cruz Azul es un equipo mermado por sus lesionados y le ha costado en el arranque del certamen, pero, aun así, definitivamente no es una de las peores plantillas del futbol mexicano para ocupar ese lugar.

El problema con La Máquina es de fondo y directivo: el pleito que comenzó con la salida de Ricardo Peláez el torneo pasado, el regreso de la vieja guardia directiva, el eterno y fallido liderazgo de Billy Álvarez, la tardía contratación de Jaime Ordiales como su director deportivo y, por consecuencia, las tardías llegadas de los refuerzos.

Con Tigres extraña y preocupa la falta de gol, no es normal y no es común por parte del equipo regio. De fuera, da la impresión de que el equipo debe renovarse, pues ha conservado su base durante buen tiempo, lo cual es positivo, pero sin Gignac pareciera que los jugadores responsables del peso ofensivo no pesan, o simplemente, no están al nivel.

Al torneo le quedan muchas fechas y seguro vendrán sorpresas, no son tan malos los que hoy están abajo ni tan buenos los que están arriba. Que se emparejen América y Monterrey en cuanto a sus jornadas y ahora sí, que comience la competencia pareja.

Twitter: @_NataliaLeon_