El Clásico presionó

Viernes 09 de abril de 2021

Quiero dejar algo claro: no estoy en contra de la apertura de los estadios. Partiendo desde ahí, me planteo a mí y a ustedes, si era algo que urgía o no. 

Estamos en el mejor momento de la pandemia. Atrás quedaron los mil contagios por día y el gran número de fallecidos, que sigue habiendo, no hay que olvidarse. Entonces, mi duda es, si realmente estamos a la altura de un suceso como ese o si la cercanía del Clásico obligó a ceder. 

Si este partido se hubiera jugado en la fecha 4 o 5, no tengo dudas de que a lo mejor en este torneo aún no se daba esta noticia en Nuevo León. El virus causó estragos, y porque haya bajado el número de contagios, no quiere decir que ya estemos salvados. 

Estoy feliz de volver a ver gente en las tribunas. Con el protocolo y todo lo que conlleva esta nueva normalidad, pero la decisión fue algo apresurada. Celebro que el número sea bajo, sólo el 20 por ciento, porque un partido como el Clásico Regio es especial y no sé cuánto se pueden llegar a respetar las normas. 

Insisto. No estoy en contra, sólo siembro la semilla de la duda. ¿Era algo realmente necesario? Del lado de los clubes, vale más en lo moral y anímico, que en lo económico. Porque sólo les sirve para devolverles los partidos a los abonados que les quedaron debiendo en el 2020. 

Ojalá que sea una fiesta, que todo siga su curso y dentro de dos semanas no estén dando marcha atrás porque se asomó una nueva ola o algo parecido. Solo creo que se apuraron, por la presión del Clásico.