Malagradecidos

Sábado 24 de abril de 2021

Señoritas, señoritos, chamacos y chamacas, este atole ya espesó... Justo a la hora de checar sus tickets para abordar el tren a la Liguilla, hay unos que ya están cinchos. O sea, listos, monta'os y arma'os, y otros subiéndose los pantalones y poniéndose las botas o a punto de quedarse...

El Monterrey llega al Clásico Regio medio peloteado. Ya vimos. Viene de hilvanar dos tropiezos consecutivos, seguiditos y en fila, o sea, uno tras otro. No sé si sea el desgaste de jugar al mismo tiempo la Concachafa, pero por ahí puede ir la cosa. Vencieron a Toluca en el Nemesio Díez, luego despacharon al Pantoja dominicano con dos triunfos y luego le dieron respiración de boca a boca al Pachuca y a Chivas, nomás para no perder la bonita costumbre de andar levantando muertos. 

Ahora, el chiverío no necesitó la ayuda arbitral y si a alguien se le hizo sospechoso que al minuto 90 pasara Alexis Vega como Juan por su casa, entre cinco defensas, para ir a darle un balazo a quemarropa a Hugo, lo siento mucho. Pero ahí sí dices: Achis, eso estuvo medio curioso. 

Como sea, el Monterrey, luego de las vacaciones de Javier Aguirre, regresa, muy apenado, muy castigado, pero lo bailado ni quién se lo quite y llega al Clásico con el rabo entre las patas para enfrentar a unos Tigres que traen una kermés en las oficinas.

Con esto les digo todo. Todavía no entran los nuevos directivos y ya hicieron un desgarriate por no decir algo más feo.

¿En qué compañía logras hacer estropicios sin haber siquiera tomado posesión como directivo?

Pues acá, hasta un tuit con muuuuy mala leche de parte del que será el nuevo presidente, ha provocado que el despido de Tuca, que aún no lo anuncian, pero ya es un hecho, pero no lo quieren reconocer, pero sí es cierto, pero que no es oficial, pero sí es real, traiga consigo un tufo a podrido medio regular.

Los felinos le ganaron a Querétaro, luego le ganaron a Juárez y perdieron con América y en los tres juegos anotó Diego Reyes, quien ya lleva más goles que Gignac -mide con esa vara la crisis del equipo- y luego empataron ante Pumas y regresan a casa luego de que en el juego pasado ante las Águilas, los despidieron con abucheos y carteles de ¡Fuera Tuca!

Tigres está fuera de la zona de clasificación, aunque apenas a tres puntitos del sorprendente Atlas, que recibió ayuda de varias fuentes para estar en la Liguilla y salvarse de pagar una millonada al cierre de las operaciones, como dicen los financistas.

La Liga y la televisora que parte el queso en la mesa, necesita ciertos equipos en la Liguilla y para ello harán ciertas maniobras. De mí se acuerda.

Por ahora, Tigres intentará ganar este Clásico por dos razones primordiales: porque es el Clásico del orgullo y porque lo menos que pueden hacer los jugadores es partirse el alma en los dos últimos juegos de la Liga para clasificar y luego ya ahí, que suceda lo que tenga qué suceder.

Ahora, podría suceder que avanzaran y disputaran otra Final hasta ganarla, si los jugadores se proponen ofrecerle a su entrenador una salida decorosa.

Es una pena escuchar de la gente que le va a Tigres que Tuca debe irse, porque ya no les sirve.

En lo personal, a mí no me convence totalmente cómo juega ese equipo (y eso, por supuesto que a nadie le importa), pero si fuese fan, defendería con bravura a este tipo gruñón que los sacó de la mediocridad y los llevó de la mano a otro nivel; les dio 5 Ligas, 3 Campeón de Campeones, 1 Copa y 1 Concachafa, entre otros títulos.

Y ninguna Liga les sabrá mejor que aquella ganada en la casa y ante la gente de Rayados... 

Sin embargo, justo a días de convertirlo en el único equipo en llegar a una Final de un Mundial de Clubes, deciden deshacerse de sus servicios...  

No sé cómo se sientan directivos y aficionados con respecto a eso, para mí no dejan de ser ingratos, malagradecidos. Resultadistas, de corta memoria. 

Claro que en algún momento debería irse, pero no así. No así...

Estoy de acuerdo que en cierto momento debieron contemplar el relevo, hace dos o tres años, hoy, o dentro de tres años, como le habían prometido a Ferretti antes de echarse para atrás y constatar que la palabra entre los hombres vale... Pero entre directivos de futbol, no tanto.

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Una pregunta: 

¿Por qué una futbolista profesional tendría que rifar una camiseta de un colega a 150 pesos el boleto, para obtener recursos y operarse una rodilla? 

Qué pena que suceda. 

La jugadora se llama Alexandra Martínez, el futbolista que le regaló la camisa se llama Bruno Valdez, del América, y hace unas horas la obligaron a borrar el tuit donde ofertaba los boletos. 

A pregunta de por qué no la apoya su club, el Necaxa, dijo que "es un tema delicado".

Y mucho. Te lesionas jugando para ellos y no te respaldan. 

Debería darles vergüenza.